La evocación para un mito argentino

Nora Iniesta, Cristina Álvarez Rodríguez

y Ginés González García

El lunes 7 de mayo, Eva Perón hubiera cumplido 88 años. Precisamente, el viernes 4, la artista plástica Nora Iniesta -con alrededor de 100 obras- inauguró la muestra “(D) Evocación Argentina”, que hasta el 7 de julio estará exhibida en el Museo Evita, en Lafinur 2988, a metros del Jardín Botánico. El sitio para emplazar esta exposición no fue elegido al azar; el edificio albergó al Hogar de Tránsito Nº 2 de la Fundación Ayuda Social Eva Perón, y fue declarado de "Interés Cultural y Patrimonio Histórico" por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y "Lugar Histórico Nacional", por el Poder Ejecutivo Nacional. Iniesta combina técnicas mixtas, como el collage sobre cerámicas, maderas, metal, pasta espejos - con una frase impresa, tan alegórica de aquellos tiempos como "Vacaciones para todo el que trabaja" o "Justicia social"- y bandejas de cartón; además de tejidos y teñidos a mano. Resaltan el conjunto de nueve cajas que contienen platos de porcelana sobre técnica mixta, donde la eterna sonrisa de "La Abanderada de los humildes" se perpetúa, no solo en las piezas de Iniesta, sino en el anacronismo.La serie de 39 fotografías titulada "Evita maestra recorre el país", da debida cuenta del plan de alfabetización y concientización de masas que el régimen proponía por entonces. La razón de una vida por el pueblo, queda a la vista a través de trabajos realizados sobre pizarras. Caligrafías estampadas en el papel, retratos de la Primera Dama, paisajes, banderas, flores de ceibo, entre otros elementos son denominadores comunes de esta serie. No debe resultar llamativa la instalación de 149 baberos con nombres bordados de niños y niñas, bajo el título de Futuro e Identidad. Eran los más privilegiados, claro. En esa atmósfera lúdica - nunca desprovista de muñecas, abalorios, pedrería, cristales, fichas, cuentas de colores- que rige esta exposición, permite multiplicar la imágen-símbolo de una mujer que la historia convirtió en mito. Esta evocación logra su cometido ■